martes, 20 de septiembre de 2011

Yo sí quiero

En relación al artículo publicado el pasado 26 de mayo 2011 en el diario 'La Nación' de Costa Rica '¿Turismo rural? No, gracias', estamos dando nuestra respuesta al señor Giovanni Rodríguez:

Señor Rodríguez, yo sí creo que
el turismo rural es una alternativa SOSTENIBLE para el desarrollo de las poblaciones rurales del país. Lástima, ese pequeño gran detalle fue lo que faltó en su artículo: el término sostenible. El turismo rural no es la única solución para rescatar a los campesinos de la pobreza, sino la parte de todo un conjunto, en donde el turismo sostenible viene siendo tan sólo una alternativa tejida entre las otras diversas actividades productivas que interactúan en armonía en un medio rural. Es decir, turismo rural es igual a: actividades productivas rurales + sostenibilidad + viajeros sensibles. Esto significa que el turismo rural no puede sobrevivir por sí mismo y menos ser el único al que se le achaque la responsibilidad del desarrollo rural en Costa Rica, cuando es más bien una oportunidad consecuente del balanceado funcionamiento de un enorme resto de elementos que intervienen no sólo para propiciar desarrollo rural, sino también sostenible. En breves palabras: si el resto es un caos, simplemente no hay terreno para el impulso de un genuino turismo rural comunitario. Yo no voy a dejar de cuidar vacas o sembrar café para dedicarme a sólo atender turistas y todavía creer que hago turismo rural. Yo no voy a continuar usando cantidades exageradas de agroquímicos y pagar a los colaboradores lo mínimo que se me antoja y todavía creer que estoy haciendo turismo rural, peor asumir que así alcanzaremos un desarrollo sostenible.

Con respecto a su contribución a la economía, el turismo rural comunitario es un aporte a la diversificación productiva en donde además de reactivar las economías locales y ser un generador de empleos, tiene la capacidad curiosa y aplaudible de revalorar lo autóctono, al permitirnos jugar con nuestras propias fichas, aprovechando así los recursos naturales y culturales con que contamos, sin dejar de ser como somos, es decir, con autenticidad.

El turismo rural gestionado bajo principios de sostenibilidad, responsabilidad y comercio justo, además de entendido así por las redes y touroperadores que lo representamos, sí puede fortalecer la producción del país y contribuir con el desarrollo rural, pero para ello, es también imprescindible, el compromiso de las instituciones del Estado y el apoyo de los otros actores a nivel local. Que todavía hace falta liberarlo de muchos arcaísmos eso es otra cosa, pero ese es el siguiente paso por parte de quienes estamos aquí dentro todos los días. Sin embargo, como bien lo expresa usted en su artículo, éste aún “es relativamente reciente y se encuentra en una etapa inicial”, entonces: ¿por qué más bien no le damos una oportunidad, ayudando a construirlo mejor y no simplemente rechazándolo?

Firma Elena Arias U. (presidente y representante legal de Turismo Auténtico S.A.)

viernes, 8 de abril de 2011

www.turismoautentico.com


Somos una touroperadora especializada en Turismo Rural Comunitario por Costa Rica, Nicaragua y Panamá, siempre con orientación en la sostenibilidad de nuestros destinos.

Nuestra misión es promover un turismo responsable con las comunidades receptoras, que las impulse a desarrollar sus propias capacidades, fortalecer su cultura y preservar la riqueza natural de sus territorios, siendo esto lo que llamamos un Turismo Auténtico.